viernes, 11 de febrero de 2011

" COSTUMBRES SEVILLANAS. " (3ª parte)

Una vez concluida la fiesta del Rocío los sevillanos regresan a la ciudad. Y os voy a seguir contando el sevillanear y las costumbres de las gentes de Sevilla. Que Sevilla a pesar de ser la capital de Andalucía es un pueblo grande donde se conoce la gente entre sí.


Si, si pueden llevan la vida de los vecinos, no tienen bastante con la suya que llevan la vida de los demás, cosas de Sevilla que le gusta el alcahueteo. Como en todos los sitios. La gente de por sí es alcahueta y envidiosa. Porque a mí me lo dicen en mis escritos comentaristas, listillos, que a la vez son envidiosos porque estar pendientes de mis escritos para poner comentarios de ellos ¡os podéis imaginar! Todo el que lea este artículo. Que puede pensar ¿es que todos mis artículos tienen crítica? ¿O es que me tienen envidia?



Pero me da igual, al escribir me expongo a ello. Pero mi corazón me dicta que escriba y que rabien los envidiosos. Bueno estábamos en el mes de mayo que concluía con el Rocío. Y en Sevilla como buena ciudad Mariana está por antonomasia el mes de las flores en el que las Iglesias se adornan con muchas flores todas las imágenes. Pues a mayo se le dice el mayo florido.



Termina mayo y empieza junio un mes por excelencia Eucarístico para la ciudad, aunque en Sevilla todo el año está la Eucaristía expuesta en la capilla de San Onofre en la plaza Nueva frente al ayuntamiento y todos los sevillanos pueden visitar a Jesús Sacramentado. Pero en junio esta el célebre día; de tres días tiene el año que relucen más que el sol, jueves Santo, CORPUS CRISTI y el día de la Ascensión.



Y Sevilla celebra el día del Corpus y saca a Jesús Sacramentado por la ciudad en una mañana de sol radiante con las calles alfombradas de juncias, romero y olor a pétalos de rosas. Para que pase el Santísimo por la ciudad en olor de multitud de sevillanos que madrugan ese día festivo en la ciudad, para ver a Dios por las calles de Sevilla.



Las hermandades de la ciudad se encargan de poner altares típicos de esta ciudad por donde va a pasar el Santísimo con motivos alegóricos como son el Pan y el Vino representado en racimo de uvas y adornos con imágenes y velas encendidas como si de un altar de una Iglesia sevillana se tratara. La gente suele vestir muy bien para tal ocasión y suele visitar todos los altares expuestos por las céntricas calles de la ciudad donde suele pasar el cortejo.



Que va acompañado por una representación de todas las hermandades tanto de penitencia como de gloria y sus estandartes. Representaciones de autoridades civiles y militares, así como todo el elenco de canónigos y párrocos de la archidiócesis que quiere acompañar junto al prelado al Santísimo Sacramento en su Custodia de Arfe toda bañada de plata y adornada con racimos de uvas y espigas de donde se saca la harina para hacer el pan.



La Giralda no cesa de repicar. La ciudad está en ese momento toda engalanada de balcones engalanados y banderolas por las calles puestas por el ayuntamiento para tal evento. También acompañan la procesión del Corpus una compañía del Ejército que rinde honores en la procesión y al final desfila delante de la Custodia. Es decir el llamado junio Eucarístico.



Y ya hemos entrado en la estación del verano, donde los ciudadanos de Sevilla empiezan a marcharse a las playas todo aquél que tiene un apartamento en los litorales cercanos a la ciudad, como son las provincias Huelva, Cádiz y también de Málaga. Ya se nos aproxima el mes de julio y en Sevilla es inaguantable el calor. Los sevillanos que trabajan van cogiendo sus vacaciones veraniegas y todo el que el bolsillo se lo permite se lanza y deja la ciudad por un tiempo y se va a las playas de los litorales más cercanos a esta ciudad.



Sevilla se queda sola con los que no pueden irse de vacaciones, nada más qué los fines de semana o dos o tres días, a casa de amistades. En Sevilla suben las temperaturas y no se pueden transitar sus calles. Todo el mundo o casi todo tiene refrigeración en sus hogares. El consumo eléctrico se dispara en la ciudad. Todo el día con el aire acondicionado puesto, hasta para consolidar el sueño. Es inaguantable.



Tenemos que usar la ducha varias veces al día para refrescarnos. Sevilla la ciudad del calor. Pero también de una feria en julio en pequeño. Si, si como lo leen con 40º de temperatura en el barrio de Triana. La famosa Vela de Santiago y Seña SantaAna a la orilla del río Guadalquivir en la calle Betis y aledaños de calles, con sus típicas avellanas verdes, con sus sardinas asadas, y es que Sevilla es así.



Con fiestas a 40º de temperaturas y las gentes que estamos en Sevilla sin ir a la playa vamos a la vela de Seña SantaAna. Y nos ponemos moraos de Cruzcampo y de tapitas de todas clases en las pequeñitas casetas que se instalan en la vela más antigua de Sevilla y de su barrio más popular Triana, como siempre con mucho bullicio a empujones y a refregones.



Pero sabiendo divertirse el barrio de Triana y las costumbres sevillanas. En la plaza del Altozano instalan un gran escenario para actuaciones de copla y de cantes por sevillanas. Y se dan homenajes a personajes del barrio de relevancia, que han hecho por el barrio como cantantes afamados que han llevado el nombre de Triana por el mundo entero. Y es que Sevilla tiene mucho que contar y contaré sevillaneando. Seguiré. Manuel Enríquez Becerra. Sevilla.