Creo que no soy el más apropiado para hablar en nombre de los sevillanos. Porque eso quién van hablar son las urnas. Pero el señor Zoido que se presenta por el partido Popular es merecedor del sillón de la Casa Consistorial del ayuntamiento hispalense. Un hombre con una escuela sabia, pues viene de una carrera brillante como es la de justicia.
Pues es juez de los tribunales en excedencia, por amor a Sevilla a la política y a los sevillanos. Un hombre que lleva bastante tiempo conociendo todos los barrios de Sevilla y conociendo todos los problemas que existen en ella. Las calamidades que existen en ella y lo abandonada que está desde que llegaron los socialistas a ella apoyados por la coalición de I.U. dueña del baúl de los caudales del Consistorio.
Que ha hecho toda clase de favoritismos entre sus militantes. Cosa que los demás sevillanos no hemos tenido acceso a favoritismos del ayuntamiento hispalense . Cuando el señor Zoido se ha ganado a pulso día tras día al pueblo de Sevilla que ahora no tiene más remedio que cumplir. Sino ya sabe que en las próximas elecciones a Sevilla por las buenas se la lleva bajo el brazo pero por las malas es una ciudad vengativa.
Y le haría pagar todo lo que no haya cumplido. Y con una oposición apuntando y disparando desesperadamente. Para volver a coger de nuevo en lo sucesivo las riendas de la ciudad. Así que señor Zoido no, nos vaya usted después a defraudar que Sevilla pasa factura.
Que Sevilla lo mismo que encumbra se olvida. Que tenemos muchos ejemplos con los artistas y con muchos personajes que los dejo en el olvido después de encumbrarlos. Aunque no creo que ese sea su caso. Ya que usted ha sido por donde quiera que ha ido pasando un reguero de caudal dejando sus bolsillos vacios día tras día, invitando a los sevillanos a tomar un café y ayudando a personas de su bolsillo, que le han dicho hoy no tenemos para ir a la panadería por el pan y usted se lo ha sacado de su bolsillo y lo ha dado.
Eso me consta de usted más o menos pero se lo ha dado. Y en el consistorio solucionará muchos problemas calamitosos de la ciudad de personas desempleadas y que no tienen para ir saliendo para adelante. Porque es humano, porque es cristiano, y porque es buena persona.
Otra cosa que tiene usted a su favor es que cumple con las tradiciones sevillanas. Se pondrá sus mejores galas para asistir como primera autoridad de la ciudad hispalense. Para representar a la ciudad en cualquier evento o tradición y no será chabacano. Seguro que contratará un jefe de protocolo con toda garantía, para la Casa Consistorial como cuando estaba Don Mauricio Adame, que ya se jubilo y el ayuntamiento está falto de eso en Sevilla.
También confió en usted en que no nos suba los impuestos. Cosa que dudo mucho con la deuda que le dejan a sus espaldas la anterior corporación. Pero como hombre ejemplar sabrá administrar bien el dinero de los sevillanos. Aunque usted se baje el sueldo, pondría la mano por ello y eso que lo conozco poco.
Tampoco le volverá a dar los bono-bus gratis a todos los jubilados. Ya que hay muchos que tienen muy buenas pensiones y lo pueden pagar y si se lo diera agravaría la deuda en TUSSAM y no creo que eso le venga bien a la ciudad. Que el trasporte público siguiera endeudándose más de lo que está.
Llevaría a la ciudad por el camino que tiene que ir una ciudad modelo como es la ciudad de Sevilla y capital de Andalucía. Con la Iglesia habría buenas relaciones, ya que he visto que es usted un buen cristiano. Pero tampoco para tirar cohetes. Que la Iglesia a la calla callando también tiene sus arcas.
En fin hágalo lo mejor que pueda, que Sevilla se lo agradecerá y seguro que Sevilla al reconocérselo. Tendrá usted Sevilla para rato. Contando que no se quemara usted de tanto trabajar y dijera ahí os quedáis que Sevilla tiene mucha guasa y yo no me creía la guasa que tiene Sevilla. Porque Sevilla tiene mucha guasa, ahí donde usted la ve. Es muy exigente y vengativa, no se le olvide señor Zoido.
Con que átese usted bien los machos como dicen en el argot taurino. Que por algo con lo querido que era Curro Romero en La real Maestranza de Caballería por los sevillanos les dijo un día, ahí os quedáis. Que me voy. Por mucho que me aplaudáis.
Lo que sí le rogaría es que el descontento que tienen los sevillanos en todos los ambientes, se lo devolviera usted, como máxima autoridad de la ciudad. Y ese desencanto se lo volviera a dar a los sevillanos y los motivará con cultura, promoviendo la cultura, teatro, que apenas tenemos, haciendo desaparecer los bingos, los salones de juegos de máquinas tragaperras.
No dando licencias para ello. Y a la juventud dándole otra clase de eventos que no sean hacer fiestas de “botellonas”. Como emprendiéndolos como antiguamente hacíamos que nos reuníamos en los famosos guateques en salones privados como eran los tele club. Y allí íbamos todos los días y nos reuníamos y ensayábamos obras de teatro, comedias y toda clase de eventos como jugar al parchís, al dominó. Y poníamos la música para buscarnos la novia a la que pretendíamos que después fuera nuestra esposa y madre de nuestros hijos.
Y no como ahora a base de alcohol en los escampados o en los coches con la música a todo volumen y mientras más alcohol mejor, a coger una tajada para después todo el día llevarse en la cama. Eso en mis tiempos solo lo hacíamos el día de Nochevieja y el último día de feria. Porque si lo hacíamos el primero ya no podíamos ir los demás días a la feria.
Como se combate esto con la policía no permitiendo que eso se produzca. No que los gobiernos socialistas lo han permitido y ya se ha convertido en un tópico. Todo el año y fines de semana de borracheras los jóvenes que no llegarán a viejos a ese ritmo. Los hígados se les reventarán cuando menos lo esperen. Y no piensan, nada más que en el alcohol y en el tabaco. Que me perdonen, los que les gusten estas cosas, pero no saben el daño que se hacen. Allá ellos.
Bueno Señor Zoido suerte y al toro como dicen los taurinos. Manuel Enríquez Becerra. Sevilla.
