viernes, 20 de marzo de 2020

A VECES LA VIDA ES ABURRIDA

Hay días que es mejor que no existieran, de lo largos que se hacen y máxime si no tienes nada que hacer, como el que está desempleado o es una persona mayor pensionista. He hablado de este tema con amigos y coincidimos muchos en lo mismo que la vida es aburrida sino tienes donde entretenerte. Es muy aburrida, cuando te levantas y no sabes que hacer o a donde ir, o con quién hablar. Qué verdad es esa que dice el Evangelio, que Dios dijo cuando creó el mundo: no es bueno que el hombre este solo, pongámosle, una compañera. Y así fue, porque el hombre debe de tener una compañera o amiga, y tener buenos amigos también. Pero cuando te encuentras solo la vida es aburrida. Se te hacen los días eternos, y no sabes qué hacer si no te gusta ir al cine o leer o entretenerte con algo. La vida sin un que hacer es aburrida y no tiene sentido. Por eso muchas personas se meten a sacerdotes o a monjas para tener por lo menos la vida distraída en una parroquia oficiando misa, o en un convento recluido en la oración. Eso si no te has casado y no has tenido hijos. También debe de ser aburrido el no tener hijos, el hombre y la mujer los dos solos, debe de ser muy aburrido. El día a día, te acuestas y te levantas, desayunas te aseas, y te vas a la calle a aburrirte. Qué alegría me entra cuando alguien dice: yo no tengo tiempo de aburrirme y es porque tiene un trabajo y tiene que hacer cosas, o el estudiante que tiene que estudiar. Pero para la persona que es soltera y es más bien de ser solitaria la vida es un aburrimiento, dicho por montones de personas. En la vida está visto y comprobado que hay que tener un entretenimiento de algo, sino es un aburrimiento. Porque todo el día no vas a estar en una terraza de un bar gastando dinero, y viendo la gente pasear. Hay que tener un entretenimiento sea el que sea. Manuel Enríquez Becerra. Sevilla