Es triste y penoso lo de personas que mueren hoy en día y cada día más por causa de enfermedades cancerígenas en todos los sitios del cuerpo humano. Antiguamente no nos enterábamos de tantas enfermedades que imagino que también las habría pero es que hoy informan al enfermo de todo por lo claro. Lo que sí está claro que esas enfermedades de hoy en día que están a la orden del día, pues a la vista está todas las personas que desaparecen todos los días y todos los años a consecuencia de la terrible enfermedad del cáncer. Me pregunto ¿con lo avanzada que está la medicina? y que no haya remedio para estas enfermedades tan penosas, que hay enfermos que sufren la enfermedad años y saben que están destinados a morir cualquier día por causa de células que tienen en su cuerpo que se pudren y no tienen solución. Es curioso pero cada día hay más enfermedades de este tipo en personas jóvenes ya que la enfermedad no entiende de edades. Cómo también es curioso los alimentos que cada día son más sanos y más recomendados por los médicos y hacemos buenas alimentaciones y la terrible enfermedad se cobra cada vez más vidas. Porque se llegó a escuchar que todo podía ser de los alimentos que tomamos, pero si es cierto que cada día sanidad está más alerta con los alimentos y comemos sanamente, nos lavamos las manos cada día más después de haber tocado cosas infectadas pero ni por esas. Desde luego al que le viene una enfermedad de esas por derecho no lo salva ni la clínica de Pamplona especializada en esas enfermedades cancerígenas, ni la de Houston. Lo terrible de toda estas enfermedades es lo mal que lo pasan los enfermos con las quimioterapias para luego tener que morir me pongo a pensar y debe de ser terrible. Yo por desgracia he pasado por familiares con esta enfermedad y es una incertidumbre la que se vive día a día sin saber cuándo sanara si es que sana o hay un desenlace final que es lo más probable después de haber sufrido el enfermo y la familia la fatídica enfermedad, porque los que estamos alrededor del enfermo también sufrimos sin saber qué pasará con ese ser querido. Así que por eso debemos de disfrutar todo lo posible que podamos en tiempos de salud, que ya habrá tiempos de que nos llegue una enfermedad de estas que el mundo está lleno con la epidemia de esta enfermedad incurable cómo no la cojan a tiempo. Manuel Enríquez Becerra. Sevilla.
