LAS HIJAS DE LA CARIDAD.

Las hijas de la caridad que se encuentran en la calle Aniceto Saenz, junto a la plaza del Pumarejo, reparten todos los días 400 bolsas de comida al estilo picnic, para que las personas más vulnerables de la ciudad puedan comer diariamente. Estas monjas no escatiman de productos, de alimentación, incluso dan cajas de leche. La bolsa se compone de un tape con comida caliente en estilo primer plato, y otro segundo tape con un segundo plato, dando a la vez el pan y el postre conjuntamente con un refresco de bebida o una botellita de agua. A la casa de las hermanas van personas solidarias, es decir un voluntariado para ayudarlas a hacer la comida y empaquetar las bolsas. Que sería de estas personas vulnerables sin recursos sino estuvieran estas monjitas ¿Dónde comerían? Y en el barrio de Triana están las mismas monjas es decir la misma congregación con un comedor esplendido de grande para otras 400 personas, pero estas tienen un comedor bien grande y no dan bolsa sino que las personas entran dentro para comer. También hay otro comedor en la ciudad de Sevilla de los hermanos de San Juan de Dios, que da de comer a otro puñado de personas, que están en la calle o no tienen recursos económicos. Gracias a estos comedores viven muchas personas en Sevilla. Los tres comedores mencionados, están auxiliados por voluntariado que les ayudan a las monjas y a los hermanos de San Juan de Dios, a elaborar la comida. Manuel Enríquez Becerra. Sevilla.